Descubre Guna Yala, un paraíso indígena en el Caribe panameño a tan solo dos horas de la ciudad. En Burwa ofrecemos distintos tipos de experiencias, desde pasadías hasta estancias de varios dias. Elige la opción que mejor se adapte a tus preferencias.
Experiencias Burwa
Pasadía en Guna Yala
El tour de pasadía o 'Island Hopping' toma menos de un día: es perfecto para quienes quieren conocer Guna Yala en poco tiempo. Explora este mágico archipiélago y regresa a la ciudad antes del ocaso.
Cantidad mínima de personas
no hay
Duración
de la experiencia
14 horas
Precio
por persona
145 USD
Navega por San Blas
Elige tu embarcación preferida y navega por entre las islas de Guna Yala con todas las comodidades. Nuestras embarcaciones incluyen tripulación y chef a bordo para que no te preocupes de nada.
Cantidad mínima de personas
no hay
Duración
de la experiencia
Pasadía, Uno o varios días
Precio
por persona
desde 350 USD
Sobre el destino
Guna Yala (también conocido como el Archipiélago de San Blas) está formado por 365 islas paradisíacas situadas en el Caribe panameño, a apenas dos horas de distancia de la ciudad. Estas son autogobernadas por la etnia Guna, una de las varias tribus indígenas originarias de Panamá.
En marzo de 1925, los Guna se revelaron ante las autoridades panameñas como respuesta a la occidentalización forzada, logrando un acuerdo de respeto de las costumbres indígenas y la autonomía de la zona.
La estructura social de los Guna se organiza a través de sus Congresos Generales (organizados políticamente en comarcas), y sus Congresos Locales (organizados por comunidades). A nivel nacional, los Guna tienen autonomía sobre las decisiones que ocurren bajo su territorio.
Del total de islas en el Archipiélago de Guna Yala, 49 de ellas son comunidades donde la mayoría de isleños hacen vida: hay escuelas, centros médicos y espacios de reunión. Además, existen más de 30 islas dedicadas completamente al turismo en las que encontrarás diversas opciones de alojamiento, todas muy rudimentarias y de materiales naturales. El resto son islas vírgenes o campos de palmeras dedicados a la exportación de cocos.